Llegó el día 8 y, como ya viene siendo habitual, nos pasamos la semana previa visitando a nuestros amigos del grupo de meteorología y hablando con la tía Espe (de esperanza) y con la tía Rosario (de rezar). Pero una vez mas nuestra magnífica planificación y esfuerzo coordinador funcionó como un reloj. Contratamos una ventana de buen tiempo entre los avisos de llegada de la prima Dana y el fin del mundo a plazos ¡¡¡ y empezamos dándonos crema para el sol!!! . Un poco asustados por las alarmas y alertas pero aquí aparecieron nuestros avezados aventureros.
Observen los avezados aventureros siendo adoctrinados por Javi sobre el auténtico significado de ser parte de Ingebike.
Así que nos lanzamos 23 personas a la aventura. Recogimos por el camino a algunos más de los que veis . Esta vez no pudimos facilitaros bicicletas de la Universidad pero salió todo muy bien. Volvimos a colapsar el tráfico de la ciudad, hasta los semáforos se ponían en verde, a veces.
Nuestra primera parada fue el el Parque de la Marga, donde comenzó la parte mas productiva de la mañana. Nuestra flamante Catedrática y sin embargo amiga Amaya Lobo empezó a quitarle capas a nuestra realidad y empezó a expandirse el aroma de Ingebike que ya nos va sonando, ¡¡que tenemos unas marismas preciosas, que sí!!, pero es que para que estén así de limpias tenemos mucha ingeniería oculta que las protege …. de nosotros.
Nos presentó en primer lugar el sistema de basuras neumáticas que se ocupa de trasladar todos nuestros residuos de los barrios Castilla y Calle Alta a un centro de compactación de basuras ¡¡¡¡Que convive con el parque de la Marga!!!!. ¿Os acordáis del parque de las Llamas y sus bombeos de la primera visita?. Ved a nuestra profe Amaya haciendo magia … Y la demostración del sistema de compactación, la verdad quedó muy chula… Nos costó coordinarlo pero bien.
Lo mas interesante es que, como ya vamos siendo unos expertos ingebikers, se montó un debate interesante. Y descubrimos una vez mas que estamos consiguiendo mucho mas de lo esperado. Algunos nos contaban que no usaban la bici para excursiones porque no controlaban como salir de Santander, pero es que los que pasan habitualmente por el parque no sabían que allí tenemos una instalación supermoderna. La Ingeniería que no se ve otra vez. Observen la atención de los asistentes oigan, !!Qué esto cae en el examen¡¡. Y lo mas importante, ¡Qué sensación de armonía!.
Nos echamos a pedalear otro poco, salimos hacia Nueva Montaña donde habíamos quedado con las marismas y de Alday, unas amigas que nos iba a presentar Amaya y de nuevo la magia de Ingebike. Nos enteramos de la historia de nuestra ciudad y de como la hemos construido a base de rellenos, de como queremos deshacer el entuerto y como estamos atados de pies y manos en nuestro interés por reconstruir.
La verdad que fue muy interesante porque aunque ya habíamos pasado por aquí antes, volvimos a descubrir nuevas cosas, y pudimos enriquecernos un poco. Amaya trajo a sus amigos y nos presentó a unos caballos que se ventilan los plumeros, a unos sistemas de válvulas que protegen las marismas y las aislan del agua salada, a los pájaros que anidan, y hasta al lobo (gusano viajero) que bloquea las válvulas. ¡Uff! salimos con una idea muy distinta de lo que hay detrás de un paisaje. Creo que la próxima vez empezaremos a felicitarnos cada vez que veamos algo interesante, pensando en el esfuerzo que hay detrás.
Seguimos avanzando por Maliaño camino de las marismas negras y ¡tachan! nueva inmersión. Ojo, no llovía nada, inmersión en la magia del aprender de nuestro alrededor. Ved que concentración.
Aprendimos muchas cosas, lo primero que nada es tan natural como parece, descubrimos que estas marismas fueron un vertedero urbano, y que todo lo que vemos es el resultado del esfuerzo de una sociedad que ha sabido encontrar la forma de dar marcha atrás y de ir a la vez hacia adelante. Hacia atrás porque ha sabido compensar el daño que ha creado y tratar de reponer lo que una vez hubo, y hacia adelante porque ha encontrado la forma de definir su futuro en torno a ello.
De nuevo un momento de magia y a la carga, aprendimos sobre los problemas de crear un entorno que funcione, reproduciendo funciones naturales con actuaciones técnicas, protección de cauces, elementos de hospedaje de pájaros, sistemas de conexión hidráulica calibrados, restricciones de vertidos residuales y reposición de cauces. Todo ello adecuadamente combinado. Así trazamos un camino saludable para el medio, las marismas están entre los ecosistemas mas productivos del planeta. De nuevo el debate y los intercambios nos hicieron sentir orgullosos de nuestro equipo. Saber cómo podemos paralizar el sistema de marismas (la eutrofización) si no nos controlamos, y comprender las restricciones que debemos asumir para protegerlas, nos hizo sentirnos orgullosos de nuestra ingeniería y lo mas importante comprobar lo productiva que resulta.
Continuamos por las marismas y alcanzamos la orilla de la ria de Tijero.
Allí hicimos un nuevo ejercicio de reflexión donde aprendimos mucho. Al avanzar cauce arriba alcanzamos una zona de ría que de nuevo nos encantó por su aspecto natural, pero pronto Amaya nos hizo ver cuantas tensiones emergen en este sitio.
De nuevo el genio de Ingebike nos inspiró, aprendimos que todo lo que vemos son rellenos que acumulan nuestros residuos por miles de años, fuimos conscientes del dilema entre actuar o mantener el estado actual, artificial pero estable, y la importancia de buscar vías de compensación eficientes, no conflictivas y que sean a la vez productivas para el medio y para la sociedad. Reconocimos la contribución de las ONG’s que se hacen cargo de tareas de restauración, seguimiento, mantenimiento y operación del medio.
Por otro lado en nuestro debate recorrimos muchos aspectos. Aprendimos sobre el estado y evolución de las redes de vías verdes en nuestro entorno, de su carácter de método de compensación y de su capacidad de generar desarrollo sostenible en el entorno rural.
Finalmente nos aprovechamos descaradamente del Prof Mario Mañana que se ha convertido en un habitual de nuestras actividades y le hicimos una pequeña encerrona. Hay una infraestructura clave de nuestra sociedad sin la cual prácticamente ningún componente de nuestra forma de vida es viable, la infraestructura energética. Pues bien, como Mario es un experto del tema le apuntamos con los focos y ¡tachan! al escenario.
La verdad nos encantó la idea de conectar todas las ramas de la ingeniería y de nuevo poner en común lo que nos une en todas las especialidades, la ingeniería que no se ve. Las redes energéticas, con sus problemas, la imposibilidad de almacenamiento, la gestión de la demanda, los dilemas entre fuentes fósiles y renovables. Puff, un nuevo mundo de ingeniería que Mario nos abrió de un plumazo. Finalmente abordamos el problema del medio ambiente y sus cambios como fuente de los riesgos a que se enfrenta nuestra sociedad, y nos volvimos a emocionar al conocer mejor el mundo en que nos movemos, y nos hizo sentirnos orgullosos de nuestra sociedad y nuestros ingenieros.
Desde aquí, nos dedicamos a mirar al cielo y a pedalear con furia, porque nuestros bonos de buen tiempo caducaban a las 14:00. Bueno, vale, no es furia precisamente lo de las fotos.
A la vuelta paramos en el Bombeo de Parayas y tuvimos otro ejercicio de inmersión en la ingeniería ambiental como elemento clave de nuestra sociedad. Amaya de nuevo saco su varita mágica y nos hizo a todos un poco ingenieros ambientales. Fue un gran fin de fiesta.
Aquí nos despedimos y lo mas importante, una vez mas como amigos. El output principal de Ingebike está siendo la creación de una comunidad de ciclistas interesados en conocer la ingeniería que nos rodea. Una comunidad que está orgullosa de luchar por trazar el estrecho camino entre la supervivencia del medio y nuestro bienestar.
!!!Hasta la próxima¡¡¡
Hemos hecho un pequeño esquema por si queréis repetir la excursión.