Nos ha llegado un proyecto muy interesante sobre una red cooperativa en la que los ciclistas se convierten en instrumentos periféricos de medición de las condiciones del aire. Se trata que se distribuyan dispositivos con los que los ciclistas se muevan por el territorio midiendo las condiciones del aire y transmitiéndoles en tiempo real a los sistemas de control.
Por un lado tenemos a los ciclistas colaborando activamente para mejorar el medio ambiente.
Por otro lado las administraciones obligadas a controlar la calidad del aire disponen de nuevas mediciones continuas, distribuidas y en tiempo real.
Finalmente los ciudadanos tienen mejor información sobre las condiciones reales de vida a las que se enfrentan.
De momento han participado 18 ciudades, pero no serán las últimas.
Os dejo aquí el link
